La mayoría de mis alumnos me dicen que siempre «estoy maquinando» cosas nuevas. Y así es. No hay cosa que odie más en mi vida que la rutina, hacer siempre lo mismo. Por esa razón lo primero que no me gusta es seguir el libro de texto y ya. No me conformo fácilmente. Me gusta innovar y hacer clases distintas. Sigo los contenidos que vienen en los libros pero intento tener siempre mi propio banco de recursos.

Lo que ha cambiado de antes del confinamiento a la actualidad es que ahora busco menos recuros y elaboro más material yo misma. De esa manera, puedo trabajar todo lo que tengo en mente dentro o fuera de la clase.

Cuando entro en clase llevo siempre el kit digital para seguir los contenidos que indican los libros con los que trabajamos.

En mi maletín de profe siempre llevo las cartas de superpoderes, recursos para la clase, cápsulas para la motivación (de las que hablaré proximamente), dados, pulsadores de colores para jugar y mi cuaderno del profesor en papel (ya que tengo uno digital también) donde anoto todo lo que se va a hacer en una sesión de clase, si se ha hecho o si no y por qué.

Para el próximo curso tengo más cosas que incluir en el maletín de profe. Pronto os contaré más.

Dentro del aula, el principal objetivo es favorecer la comprensión y expresión oral al máximo. No es una tarea fácil ya que muchos de mis alumnos no llegan a entender por qué le doy tanta importancia a la expresión oral.

En clase trabajamos las habilidades orales y la comprensión lectora. Nunca hago actividades de gramática allí. Si hay que hacer algún ejercicio sobre gramática lo hacen en casa y siempre intento enviarles la solución por classroom para que en clase dediquemos el tiempo a lo realmente importante: comunicar.

La expresión escrita, salvo que sea una tarea en grupo o por parejas, la dejo también para casa.

Siempre he trabajado la gramática y el vocabulario en contexto, intentando que  las estructuras vistas en la unidad 1 salgan en la udi 2, la 3 y así sucesivamente.

Por lo que el tiempo dentro del aula siempre está destinado a favorecer al máximo la comunicación.